My Dress-Up Darling es uno de los animes más esperados de la temporada de anime de invierno de 2022, sólo por detrás de continuaciones de series tan queridas como Attack on Titan y Demon Slayer. Dependiendo del sitio web, puede incluso ser la primera serie nueva de la lista. Es fácil ver por qué, dado que su tema es el cosplay. Cuando la chica popular Kitagawa Marin descubre que el solitario de la clase Gojo Wakana sabe coser, le convence para que le ayude a realizar sus sueños de cosplay. El problema es que Wakana sólo ha hecho ropa para muñecas.
El cosplay es un elemento básico de la cultura de las convenciones en todo el mundo y algunos incluso lo han convertido en su carrera. Incluso si un aficionado al anime no hace cosplay, probablemente conozca a alguien que lo haga. Sin embargo, a pesar de su prevalencia, el cosplay aún no ha recibido un anime dedicado a él. Hay series que cuentan con un personaje que hace cosplay, como Koyanagi, de Wotakoi. Otras tienen cosplay pero no se centran en él, como Ouran High School Host Club. Pero no se puede decir que ninguna serie sea un anime centrado en el cosplay. My Dress-Up Darling puede ser la única que lo sea, y que además se salte la norma del fanservice.
Muchos fans del anime han intentado alguna vez hacer cosplays, y algunos se han apasionado por ellos, pero incluso aquellos que sólo lo han intentado una vez pueden sentirse identificados con My Dress-Up Darling. Marin y Wakana comienzan como completos principiantes del cosplay, ya que Marin no sabe coser y Wakana nunca ha hecho ropa para una persona. Desde la elaboración de patrones hasta la elección de materiales, los dos van paso a paso. Experimentan el estrés de la estafa, el agotamiento por el calor, el cosplay en grupo y otros acontecimientos con los que todo cosplayer ha tenido que lidiar.
En estos momentos parece una carta de amor al cosplay, y todo se debe al duro trabajo de su creador. El mangaka Shinichi Fukuda se esforzó mucho en los aspectos del cosplay de My Dress-Up Darling para que fuera lo más realista posible. En el epílogo de todos los volúmenes publicados hasta ahora, hablan de los viajes de investigación que ha realizado para la serie. Ha visitado tiendas de pelucas y eventos de cosplay, ha entrevistado a cosplayers e incluso ha probado a hacer cosplay él mismo para entender mejor el tema.
Aunque My Dress-Up Darling se toma muy en serio sus elementos de cosplay, también se divierte mucho. También es una comedia romántica que deja claro que no todos los pensamientos de Wakana son inocentes. Está claro que está enamorado de Marin, y el manga utiliza la “cámara” para mostrar las múltiples facetas de su atracción.
Wakana siente mucho cariño por Marin una vez que se conocen y hace todo lo posible por respetar su espacio personal, pero su lujuria es evidente cada vez que se muestra un panel a través de su punto de vista. Cuando la mira, acaba centrándose en alguna parte de su cuerpo y el lector recibe la misma visión. Sin embargo, lo que hace que las escenas de My Dress-Up Darling sean diferentes del fanservice estándar es la propia Marin.
En muchas escenas de fanservice, es habitual que el personaje en cuestión se sienta avergonzado u ofendido cuando se da cuenta de que la están mirando, pero ese no es el caso de Marin. Está muy segura de sí misma y no le importa lo que piensen los demás. Esta filosofía se aplica a todo lo que la rodea, desde sus intereses otaku hasta su cuerpo. Por supuesto, tiene límites y deja claro cuándo necesita intimidad, pero tampoco le da reparo quedarse semidesnuda delante de un chico mientras le toma las medidas para un cosplay.
Marin incluso inicia parte del fanservice, coqueteando con Wakana cuando éste se pone nervioso o mostrando un poco de inmodestia cuando necesita su opinión sobre pequeños detalles del cosplay. Lo hace varias veces en los primeros capítulos del manga y, al hacerlo, participa en el fanservice en lugar de que se lo hagan a ella. En un medio en el que lo normal es lo contrario, es agradable ver que la norma se desvía un poco.
El año 2022 ya apunta a ser un gran año para el anime, ya que se inicia con muchas novedades en la temporada de invierno. Esperemos que el estudio de animación CloverWorks capture la magia del manga de Fukuda y convierta a My Dress-Up Darling en una serie que los fans del cosplay y el fanservice no puedan perderse.