Es casi imposible negar que entre tanto anime que se estrena cada trimestre, aquellos que habían quedado heridos emocionalmente con el final de la primera parte de “86: Eighty-Six“, ya estaban recuperados. No obstante, si bien la segunda parte mantiene una de las tramas más intensas de esta temporada, también está destacando como una de las producción más aparentemente desorganizadas.
¿Por qué se dice esto? Bueno, porque si sigues el anime con regularidad, sabrás que el calendario de “86: Eighty-Six” está siendo de todo menos regular desde hace algunas semanas; otra forma de verlo, sin embargo, sería que la irregularidad se ha convertido en su nueva regularidad. Las cosas son como son en la actualidad:
- Hace unas dos semanas, el episodio 7 de la segunda parte del anime se retrasó. En lugar de emitirse el 13 de noviembre como estaba previsto, se emitió durante el 20 de noviembre.
- Junto con ese retraso, se anunció casi simultáneamente que tampoco habría episodio de “86: Eighty-Six” el 11 de diciembre; en su lugar se emitirá un “especial” por especificar.
- Tras el anuncio de estos dos retrasos, se anunció un tercero relativo al capítulo 8 de la segunda parte. Es decir, que el 27 de noviembre no habrá nuevo capítulo de la serie (darán luz verde a otro ‘especial’), sino que habrá que esperar ya hasta el 4 de diciembre.
- Serán, por tanto, tres capítulos consecutivos que llegarán con una distancia de dos semanas entre ellos, y no con el margen semanal con el que se venía emitiendo el anime desde su parte 1.
La verdad es que ya se ha empezado a ver a bastante gente que ha señalado que el anime ha dado un pequeño bajón de calidad. Algunos todavía se aferran a la brutal exhibición bélica de hace un par de episodios que les pareció una de las más espectaculares en cuanto a producción de este 2021. Por desgracia, es innegable que la situación actual es cuanto menos inadecuada, y por mucho que parezca que no hay problema en dar a los animadores el tiempo necesario para completar un episodio como es debido, resulta inevitable pensar en cómo debe ser el ambiente interno a estas alturas.
¿De qué trata 86: Eighty-Six?
La desaparición del Escuadrón de la Cabeza de Lanza más allá del horizonte no sirve para ocultar la intensidad de la interminable propaganda de la República de San Magnolia. Vladilena Milizé sigue actuando como “Manejador Uno”, comandante de otro escuadrón deshumanizado de la facción 86 en la continua guerra contra la Legión. En el frente occidental, Shinei Nouzen y su escuadrón están en cuarentena en una base militar controlada por la República Federal de Giad, antes conocida como Imperio Giadiano. El nuevo gobierno concede a los ochenta y seis salvados la plena ciudadanía y la libertad. Alojados por el propio presidente Ernst Zimmerman, el grupo conoce a su hija adoptiva y última emperatriz, Augusta Frederica Adel-Adler.